
Estimada Comunidad Educativa: familias y docentes
Nuevamente nos encontramos ante el desafío de un ciclo lectivo que comienza.
Abrimos una vez más nuestra escuela a nuevas inquietudes, miedos, emociones y alegrías para todos los integrantes de nuestra comunidad educativa.
El Papa Francisco nos recuerda que “la educación es siempre un acto de esperanza”.
Es importante poner a la Persona Humana en el centro de la Educación.
En este 2023 que se inicia, presentamos también el Lema que nos acompañará este año: “ENVIADOS A DAR VIDA”
Este mismo tiene que ver con la Misión, principalmente en la tarea de educar y colaborar en el crecimiento de nuestros alumnos, ustedes familia, desde sus hogares y nosotros desde la escuela.
Deseamos transitar un año donde podamos celebrar la alegría del encuentro en comunidad y con Jesús, el Maestro. Y que este encuentro sea testimonio de esperanza y el crecimiento personal al que todos estamos llamados.
Para esto también es importante tener presente los valores que nos propusimos trabajar como comunidad:
Respeto: El respeto como valoración de la dignidad de las personas. Se plasma en: el vocabulario y la prudencia al hablar, la puntualidad, el cultivo del pudor y la intimidad usando ropa adecuada, en el clima que generamos, en el cuido del bien común, en la presentación de trabajos, en la capacidad de escucha, en la actitud de servicio y cuidado de los adultos hacia los más pequeños y la confianza y obediencia de estos, hacia los adultos responsables.
Responsabilidad: La responsabilidad es la capacidad de asumir nuestros compromisos y obligaciones como también las consecuencias que devienen de nuestras decisiones (palabras y acciones), sobre nosotros mismos y/o sobre los demás. Con ella, podemos dar el paso para reparar los efectos de nuestros actos.
Roguemos al Señor que camina esta Cuaresma con nosotros, que podamos escuchar y vivir su Palabra y que María, Reina de la Paz, nos conduzca al Pastor que es Camino, Verdad y Vida.
¡Buen comienzo para todos!