Jesús, dame la libertad de servir gratuitamente

Evangelio del día – Lunes XXXIV Ord Lc 21, 1-4

“Vio también una viuda pobre que echaba dos moneditas, y dijo: «En verdad os digo que esa pobre viuda ha echado más que todos, porque todos esos han contribuido a los donativos con lo que les sobra, pero ella, que pasa necesidad, ha echado todo lo que tenía para vivir»” (Lc 21, 2-4).

Dialogamos con Jesús:

• Gracias Señor porque ves nuestro corazón; valoras las intenciones y esfuerzos. Quieres que seamos auténticos y sinceros, para que vivamos en paz.
• Yo premio el bien que hacen en silencio; aquello que los lleva a vivir la verdad, independientemente de lo que piensen los demás. Veo el corazón con el que hacen las cosas.
• Ayúdanos a darnos a nosotros mismos en el servicio de los otros. Que nada nos aparte del bien; que busquemos colaborar en el crecimiento de quienes están cerca, aunque ellos no puedan corresponder o agradecer.
• Yo doy la libertad de obrar desinteresadamente; quiero darles la gracia de servir gratuitamente.
• Haz que aceptemos la ayuda que nos ofrecen los otros; que siempre veamos la buena voluntad. Danos humildad para acoger al que se acerca con sencillez.
• Yo colmo de afecto el corazón de esta viuda; pues ella ha puesto su mirada en mi corazón. Ya no espera los afectos humanos (es viuda) pero está dispuesta a ayudar a quien mendiga cariño y valoración.
• Queremos estar atentos y responder a las necesidades de los demás.

¿Busco compensaciones afectivas cuando hago el bien?

¡Jesús, dame la libertad de servir gratuitamente!

En unión de oraciones,

Hno. Javier Lázaro sc