Evangelio del día – Martes XXXII Ord Lc 17, 7-10
«Cuando hayan hecho todo lo que se les mande, digan: «Somos simples servidores, no hemos hecho más que cumplir con nuestro deber»» (Lc 17,10).
Dialogamos con Jesús:
- Gracias Señor porque nos has elegido para estar en tu servicio y vivir en tu amistad. Sólo queremos fijar la mirada en Ti.
- Yo los llamo a vivir en una entrega absoluta, donde puedan desplegar todas sus potencialidades. Lo que guardan para sí, se atrofia y se pierde.
- Danos la generosidad de vivir en gratuidad; que nos sintamos honrados de estar en tu viña, sirviendo a nuestros hermanos. Danos un corazón agradecido, que tenga una memoria sanada y enamorada de ti.
- Yo les pido que estén alerta sobre los sentimientos y actitudes de su corazón; no se dejen llevar por el engreimiento o el deseo de ser más que los demás.
- Ayúdanos a no decaer en los ideales; que siempre renovemos nuestra vocación de servidores; que como enamorados de tu Corazón, te esperamos en vela.
- Yo les infundo mi Espíritu; renuncien a todo tipo de compensación o recompensa. Vean todo lo que reciben y maduren afectivamente; hagan de su vida un don para los demás.
- Haz que nuestro gozo sea hacer tu voluntad y agradarte en todo. Danos una mirada contemplativa, que te veamos presente en la cotidianidad.
- Yo estoy presente, como el que sirve; busquen identificarse conmigo. En el servicio gratuito encuentran su libertad.
¿Exijo compensaciones afectivas al hacer alguna tarea?
¡Jesús, enséñame a vivir la gratuidad!
En unión de oraciones,
Hno. Javier Lázaro sc
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