Jesús, que tu Palabra me lleve a la fraternidad

Evangelio del día – Martes XXV Ord Lc 8, 19-21

“Le anunciaron a Jesús: «Tu madre y tus hermanos están ahí afuera y quieren verte». Pero él les respondió: «Mi madre y mis hermanos son los que escuchan la Palabra de Dios y la practican»” (Lc 8, 20-21).

Dialogamos con Jesús:

• Gracias Señor porque vienes y nos comunicas la Palabra de Dios; Tú mismo eres la Palabra del Padre; nos haces sentir amados.
• Yo necesito que escuchen; que se liberen del ruido exterior, que aquieten su corazón y acojan mi Palabra. Quiero trasmitirles la vida divina.
• Gracias porque al hablarnos te das a ti mismo y haces que vivamos en comunión.
• Yo les doy mi Palabra, cuando la guardan y la practican se convierte en vínculo de unidad, más fuerte que los lazos de la sangre. En mi Palabra está mi aliento divino.
• Gracias porque nos enseñas a ser hermanos de los otros y contigo. Con tu Palabra nos haces fecundos y vivimos la maternidad-paternidad espirituales.
• Yo les pido que vivan la fraternidad, que compartan la alegría que les regalo, que estén abiertos a todos los que buscan la verdad.
• Danos entrañas de misericordia, para que acojamos a todos y les comuniquemos tu amor, anunciando tu Palabra.
• Guarden mi Palabra en sus corazones y llévenla a la práctica con la caridad. En todo momento, la Palabra les infunde los sentimientos que necesitan para descubrir al otro como hermano.

¿Dejo que la Palabra de Dios me configure interiormente?

¡Jesús, que tu Palabra me lleve a la fraternidad!

En unión de oraciones,

Hno. Javier Lázaro sc