Lectura:
“Cuando entren en una ciudad o en un pueblo, busquen a alguna persona respetable y permanezcan en su casa hasta el momento de partir. Al entrar en la casa, salúdenla invocando la paz sobre ella…Si alguno no les recibe o no escucha vuestras palabras, al salir de su casa o de la ciudad, sacudid el polvo de los pies.” (Mt 10, 11-12).
Meditación:
Jesús nos envía a llevar la Buena Noticia a todos; pero nos da una didáctica:
1- que vayamos confiando en la providencia divina y en su Nombre;
2 – que busquemos primero a los que están deseosos de crecer espiritualmente;
3- que permanezcamos en su casa, que establezcamos un vínculo de fraternidad.
En cuanto al contenido:
4- que llevemos la paz, no atemorizamos infundiendo miedo con el castigo;
5- la paz que damos es la que recibimos del Espíritu;
6- saludamos haciendo presente a Cristo, que es quien nos acompaña y nos sostiene.
En lo referido a la evaluación:
7- respetar siempre la libertad del otro, damos tiempo para reflexionar, madurar, esperamos la respuesta;
8 – estar atentos a ver quién pone interés y escucha;
9 – para quien no nos recibe, rezamos por él, no nos quedamos resentidos;
10 – volvemos cuantas veces sean necesarias.
Oración: Señor hazme mensajero de tu Reino.
Contemplación:
- Digo que llevo tu mensaje, pero trato de imponerlo, no escucho, ni respeto la libertad…
- Yo te envío, … sólo espero respuestas libres, capaces de vivir en amistad.
- Quiero vivir en fraternidad para ser tu testigo.
Acción: Anunciar a los otros el Reino.
Hno. Javier Lázaro sc.