Jesús, dame Vida con tu Palabra

Evangelio del día – Lunes XXIIV Ord Lc 7, 1-10

“No estaba lejos de la casa, cuando el centurión le envió unos amigos a decirle: «Señor, no te molestes, porque no soy digno de que entres bajo mi techo; por eso tampoco me creí digno de venir a ti personalmente. Di una palabra y mi criado quedará sano” (Lc 7, 6-7).

Dialogamos con Jesús:

• Gracias Señor porque interpretas los sentimientos de nuestro corazón, aunque algunas veces no sepamos expresarlos.
• Yo les doy la mirada de fe; necesito que la acojan, para que podamos establecer un vínculo de confianza. No se cierren sobre sí mismos, están hechos para el encuentro y la comunicación.
• Perdona que algunas veces nos faltan las palabras; pero has puesto en nuestro interior el deseo de hacer el bien y ayudar a los demás, como a este centurión que quiere que sanes a su criado, pero no se atreve a pedírtelo.
• Yo les llamo a compartir su fe. Es posible que en la familia o en la comunidad, algunos no crean, pero les pueden ayudar a caminar en la vida abriéndoles a la esperanza.
• Gracias, porque aunque no somos dignos de que nos habites, tu Palabra nos sana y nos embellece interiormente para vivir en la amistad perfecta.
• Abran el oído del corazón a la Palabra, guárdenla, para gustarla. Esto les ayudará a vivir en mi presencia; Yo en Uds., y vosotros en Mí.

¿Dejo que la Palabra de Dios me sane interiormente y me llene de su Paz?

¡Jesús, dame Vida con tu Palabra!

En unión de oraciones,

Hno. Javier Lázaro sc