Señor, dame libertad interior para amar a los otros

Lectura:

“Herodes, había hecho arrestar, encadenar y encarcelar a Juan, a causa de Herodías, la mujer de su hermano Felipe, porque Juan le decía: «No te es lícito tenerla». Herodes quería matarlo, pero tenía miedo del pueblo, que consideraba a Juan un profeta” (Mt 14, 3-5).

Meditación:

Sabemos que Herodes manda decapitar a Juan Bautista, por un juramente que hace a la hija de su concubina en el día de su cumpleaños. Juan muere por decir la verdad, denunciando a Herodes que había sacado la mujer a su hermano.

Juan es valiente y fuerte, es un profeta que habla en nombre de Dios. Herodes, es cobarde y débil; primero para acallar su conciencia hace arrestar a Juan y finalmente por debilidad, en el descontrol de una fiesta, lo hace matar. El desorden afectivo de Herodes, le hace vivir la tristeza y aunque tiene otras mujeres, no ama a ninguna, sólo las usa.

Herodes quiere poder, soldados, tiene miedo, porque carece de autoridad moral. Juan sólo posee una piel de camello para vestirse, pero se siente fuerte pues él es el enviado de Dios, anuncia la llegada del Mesías. La sobriedad de su vida le hace más respetable, pues vive la libertad interior de amar a todos.

Oración:

Señor, dame libertad interior para amar a los otros.

Contemplación:

  • Me dejo llevar por la sensualidad… me siento cada vez más vacío…
  • Yo Soy hermano; lleno tu corazón y te hago gustar mi amistad…
  • Quiero que Tú seas mi tesoro, viviendo sólo para Ti.

Acción:

Dejar las cosas que me esclavizan.

Hno. Javier Lázaro sc

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